Pórtico

Cinco puertas comunican el atrio con el interior de la basílica.
La primera de la derecha es la Puerta Santa, abierta sólo durante los años jubilares. La Puerta Central conserva los paneles de bronce provenientes de la Curia Hostilia del Foro Romano (siglo 7 a.C.).
En el extremo izquierdo se conserva una magnífica estatua de Constantino, descubierta a principios del siglo 17, en la colina Quirinal, donde el emperador tenía sus Termas.

Nave Central

En vistas del Jubileo del 1650, Inocencio X confía al arquitecto Borromini la remodelación del interior. La Catedral de Roma y del Mundo recibirá con todas sus galas tanto a peregrinos comunes como a nobles y reales.
Acudieron 160 embajadas junto a los duques de Toscana, Felipe IV de España y Mariana de Austria. Todos, sin excepción, admiraron la flamante remodelación del genio arquitectónico de Borromini.

Apóstoles colosales

Pasados más de cincuenta años de aquel acontecimiento jubilar, en los edículos de las paredes laterales de la nave central se colocaron enormes estatuas (4,60 mt) de los apóstoles, obras de escultores de la escuela berniniana; se destacan las esculturas de Camillo Rusconi. En la imagen: Andrés a la izquierda; y a la derecha, Mateo.

Altorrelieves

Sobre los edículos de las estatuas de los apóstoles -en la nave central- episodios del Antiguo y del Nuevo Testamento. Los grandes altorrelieves son obra de Alessandro Algardi; siglo 17. En el tercer nivel, sobre los altorrelieves, en medallones ovalados se representan profetas; son pinturas del siglo 18.

Altar papal y Confesión

Bajo el Arco Sacro se encuentra el Altar Papal. A sus pies, en la Confesión, la tumba del papa Martino V, cuya elección al trono pontificio puso término al gran Cisma de Occidente.

El Altar Papal está protegido por un Tabernáculo, obra gótica de Giovanni Di Stefano quien, en 1367, la realizó por voluntad del papa francés Urbano V, con la colaboración de Carlos V, rey de Francia.

Tabernáculo

El magnífico dosel ojival, sostenido por cuatro columnas de granito oriental, está adornado con estatuillas de santos, episodios en doce recuadros al fresco y algunos blasones, entre los que se distingue el del rey Carlos V.
En el interior del dosel, las imágenes de Pedro y Pablo custodian el altar, en el cual es posible que hayan oficiado misa Silvestre I -quien consagró esta basílica- y sus inmediatos sucesores.

Presbiterio

Lugar de la iglesia donde el clero se reúne para oficiar.
A los lados del presbiterio se encuentra el «coro»; así llamado el conjunto de asientos destinado al grupo de eclesiásticos que cantan los oficios.
En el lugar de un altar -en el centro del Ábside- la Catedra (asiento) del obispo, lo cual distingue esta archibasílica en la categoría de Catedral.

Ábside

El magnífico mosaico de Torriti y fray da Camerino fue realizado entre los años 1288-94. Su simbología teológica se desarrolla en tres órdenes. Superior: Cristo nimbado (con aureola), rodeado de ángeles. Intermedio: la paloma de la paz por sobre la Cruz engemada (adornada con piedras orientales) sobre la colina con los cuatro ríos bíblicos, acuden a beber dos ciervos y un rebaño de ovejas. Inferior: el río Jordán con peces, cisnes, botes y demás símbolos corrientes.

Transepto

Espacio arquitectónico, también llamado Crucero. La decoración fue completamente renovada bajo el pontificado de Clemente VIII. Es uno de los más importantes documentos pictóricos del manierismo romano de fines del siglo 16. Las grandes obras al fresco en la parte superior de los laterales representan episodios de la historia de la Archibasílica, y también de la vida de Constantino, algunos basados en la famosa «Leyenda dorada».

Claustro

En el período paleocristiano y durante todo el Medioevo, el Claustro era el centro cotidiano de la vida monacal. Según horarios preestablecidos, se reunían para rezar, estudiar, leer o pasear.
No sólo era el centro de la vida cotidiana, sino también del más allá; al fallecer un monje se lo sepultaba en el jardín central. Estos claustros fueron los primeros «campos santos» de la historia cristiana.

El trono del orificio
Al remodelar la basílica (siglo 17) se depositaron en el Claustro (foto) muchas lápidas sepulcrales, obras del antiguo Patriarchium, y del Baptisterio original del siglo 4.
Llama mucho la atención a los turistas la gran silla stercoraria en forma de trono, atribuido a la leyenda de la papisa Juana, que detalladamente se describe en este mismo Sitio Roma Cristiana : capítulo La papisa; sección Papado, Historias y curiosidades.

Logia de las bendiciones

Rememora la Logia homónima, que en el antiguo Patriarchio se encontraba en el primer piso, desde donde el papa Bonifacio VIII anunció (1300) la apertura del primer Año Jubilar cristiano.

El Patriarquio fue destruido por decisión de Sixto V (finales de siglo 16); quien a su vez ordenó la realización de la Logia actual, que mira hacia la misma plaza que la original.

Baptisterio

Original del siglo 4; prototipo de los baptisterios paleocristianos.
En la fuente circular central -ahora cubierta- se practicaba el bautismo por inmersión.
El baptisterio lateranense tiene varias capillas consagradas.

Importantes memorias se conservan en este primer baptisterio de la Cristiandad.

Santuario de la Pasión

Saliendo del Baptisterio y pasando frente al Palacio Lateranense, se cruza para entrar al Santuario de la Pasión, mundialmente conocido como Scala Santa.
El complejo comprende cinco escaleras (la central es la Santa); el Oratorio del Santísimo Sacramento; San Lorenzo in Palatio, antigua capilla privada de los papas (siglo 8) convertida en Sancta Sanctorum; y -en el exterior- el Triclinium Leoninum.

Escala Santa
Durante el año jubilar 1450 comienza a correrse una voz:
«La escalinata de Honor del Palacio Papal había sido la escalera del Palacio de Pilatos, en Jerusalén; por la que subió Jesús el día de su condena».
Amplia información en Historia / Basílicas mayores / San Juan en Laterano / Patriarchium...

Sancta Sanctorum

En el Medioevo era la Capilla Privada de los Papas del Palatio Lateranense. Dedicada al mártir Lorenzo se la llamó San Lorenzo in Palatio. Su primera documentación data del siglo 8. Debido a la cantidad de reliquias que se custodiaban en el altar, a partir del siglo 10 se la llamó Sancta Sanctorum; «lo más santo entre lo santo».
Varios relicarios y objetos litúrgicos de valor, fueron transferidos al Vaticano en el año 1905.

Acheropita

El objeto más antiguo y venerdo que aquí se conserva es la imagen del Salvador (altar) reconocida como acheropita; término de origen griego que significa «no hecho por mano humana».
La tradición narra que el autor fue San Lucas, ayudado por un ángel. Ya en el siglo 8, bajo el pontificado de Esteban II, en el Liber Pontificalis se la califica de acheropita, sin otras especificaciones.

Museo en el Palacio

En el museo de la Archibasílica -en el Palacio Lateranense- se exponen objetos papales y religiosos desde el siglo 14 hasta el 20. Entre las piezas más antiguas; túnicas utilizadas por Bonifacio VIII durante la celebración del primer Jubileo Cristiano del año 1300; partes del relicario de santa Catalina de Siena (1347-80).

​ Planos y Referencias

Las Guías iTi acompañan al visitante desde el primero al último paso de su itinerario, gracias a la variedad de planos que se encuentran durante la Visita seleccionada; ya sea General, Temática o de Opciones interesantes.
En la imagen, algunos de los planos con referencias para efectuar las visitas propuestas de la Archibasílica de San Juan en Laterano.